Esta tecnología provoca una recuperación acelerada del tejido y un crecimiento celular debido al impacto a alta profundidad y densidad que produce. Esta acción deriva en una mejora a nivel interno y externo.
En tratamientos estéticos Las ondas de choque resultan idóneas para tratar la celulitis, debido a los pequeños impactos que se ejercen contra las células adiposas y el tejido dilatado, lo que activa la circulación y la formación de nuevos vasos sanguíneos.