Los labios envejecen por culpa del adelgazamiento cutáneo, la pérdida de apoyo muscular, la atrofia ósea y la alteración de las fibras colágenas. A ello hay que sumar que se trata de una zona muy indefensa a los estragos del sol, por sus bajos niveles de melanina, y que la ausencia de glándulas sudoríparas en el epitelio hace que los labios se resequen y agrieten con mucha facilidad. Esto nos lo cuenta Marta García que acaba de incorporar en su centro de Oviedo, el tratamiento Hrydro-Lip con el que se corrigen todas estas alteraciones. Marta obra el “milagro” en 10 sesiones en las que se aplica una avanzada combinación tecnológica: hydrodermoabrasión, vacumterapia y radiofrecuencia bipolar. El resultado son unos labios tersos, definidos y con más volumen.