SUSCRÍBETE

8 Revistas      

ESPECIAL BELLEZA DE LA MIRADA
ESPECIAL BELLEZA DE LA MIRADA
 
Un parpadeo cada 6 segundos y más de 12.000 al día… ni que decir, que esta zona del rostro es excesivamente “hiperactiva”; un pequeño defectillo que, llegado el momento, le pasa factura con creces. y es que, aunque es el símbolo de seducción por antonomasia, también es la zona del rostro más vulnerable y susceptible a la edad. Conseguir que el envejecimiento le de una tregua es el objetivo de la nueva generación de productos especializados en su cuidado. Pero en este especial te presentamos mucho más… en él encontrarás también las máscaras y productos tratantes para cejas y pestañas, además de los mejores trucos para realzar la belleza de la mirada. Sigue leyendo porque lo mejor está por ver!
 
 
 

Leer más

A RITMO DEL PARPADEO
Un movimiento que pasa factura
 
Para comprender mejor por qué se dedica un trato especial a esta parte tan delicada del rostro, basta recordar sus características fisiológicas. La piel que rodea los ojos es mucho más delgada que la del resto de la cara; en concreto, el conjunto epidermis-dermis es aquí 10 veces más fino y la hipodermis, bastante menos resistente. Por otra parte, la red colágeno-elastina-fibronectina que la sostiene es muy poco densa, y la película hidrolípica es casi inexistente. Si a ello le sumamos que cada 10 años pierde el 6% de su espesor, no es de extrañar que sea la candidata perfecta para sufrir prematuramente las huellas de la edad. Además, se trata de una zona especialmente sensible a las agresiones medioambientales como el sol, las variaciones de temperatura, aire acondicionado, contaminación, humo, etc. por eso no es de extrañar que ésta se rinda abatida fácilmente frente a sus enemigos. A estas carencias hay que añadir la falta de cohesión del estrato córneo producida por la ausencia de lípidos, debido a que las agresiones externas destruyen los escasos queranocitos que se generan en esta zona.
 
La flaccidez tan habitual en esta zona se debe a que el parpadeo constantemente acaba por perjudicar la tonicidad y elasticidad del tejido celular subcutáneo. Y es que los 8 músculos que forman este tejido intervienen en todos los movimientos que efectúa el ojo. Además, hay que tener en cuenta que el párpado superior se mueve con una fuerza calculada en 2 gr, y está demostrado que puede llegar hasta los 40 gr cuando los ojos se cierran de manera rápida y forzada. A esta fuerza hay que añadirle las veces que se parpadean (260 milésimas por segundo) y su amplitud (9 mm para el párpado superior y 2 mm para el inferior). Asimismo, es justo en esta zona donde se marcan con más facilidad los signos de cansancio y estrés, dando como resultado una mirada fatigada y carente de vida.
 

3 PROBLEMAS A LA VISTA

Las bolsas, las ojeras y las primeras arrugas han sido desde siempre sus principales enemistades, y más teniendo en cuenta que dichas alteraciones no van imprescindiblemente ligadas al factor tiempo, pues estos signos pueden llegar a afectar a la mujer incluso en su más plena juventud. 

Leer más

OJERAS
Las ojeras tienen un origen multifactorial, aunque la principal causa de su presencia es de tipo genético y hereditario. Las ojeras, que dan a la mirada un aspecto triste y fatigado, se forman como consecuencia de la falta de sueño, fatiga, exposición al sol o edad. Pero su causa fisiológica está principalmente vinculada a una deficiencia de la red microcirculatoria. En efecto, su coloración azulada tan característica está provocada por la acumulación de pigmentos sanguíneo del tejido conjuntivo. El hecho de que esta coloración sea particularmente visible se debe a que la piel en esta zona es extremadamente fina. Cuando las ojeras toman una coloración ligeramente amarilla el responsable es el tejido graso. Las ojeras, por su parte, se deben a un debilitamiento de las paredes de los capilares situados a flor de piel. Permeables, dejan que la sangre traspase y se estanque en la piel. La poca consistencia del tejido hace que se “hunda” provocando la formación de un surco, donde la ojera se hace aún más visible, entristeciendo la mirada y otorgando a las facciones un semblante cansado y envejecido. 
 
BOLSAS
Las bolsas pueden estar causadas por diferentes razones: una acumulación de líquido, la presencia de grasa localizada o bien, venir derivadas por otros factores predisponentes. Las más frecuentes son las primeras y se deben a una retención hídrica transitoria o permanente por la incapacidad del riñón para eliminar el líquido corporal o por un aumento de la permeabilidad capilar regional, que puede estar potenciada por la falta de sueño, cansancio o exceso de alcohol y tabaco. Por su parte, las bolsas de grasa se forman por la localización de tejido adiposo debajo de los párpados. 
 
 
ARRUGAS Y FLACIDEZ 
No es un mito, sino una realidad, la piel del contorno de ojos es muy fina y delicada, un defecto que con los años se acrecenta, por lo que no es de extrañar que ésta se convierta en el primer punto de mira del envejecimiento. Así es, en ella es donde antes se observan los estragos de la edad y los daños acumulativos causados por los factores exógenos, como los rayos solares, agentes contaminantes, ambientales, estrés... 

MIRADA Y LUZ AZUL

Según los datos, el 60% de la población pasa más de 6h la día delante de una pantalla. Con una longitud de onda débil, este haz se caracteriza por un tipo de brillo deslumbrante, que tiene sus consecuencias. 

Leer más

La piel ve por la luz azul, sobre todo, la del contorno de ojos, así lo constatan los cosmetólogos de LIERAC. Ésta provoca daños celulares y acentúa arrugas, bolsas, ojeras y fatiga. ¿Exactamente, cómo actúa sobre la piel? La respuesta está en unas proteínas llamadas opsinas cutáneas. Las opsinas son proteínas foto-receptoras encargadas de absolver la luz. Conocíamos perfectamente su presencia a nivel de las células de la retina. No obstante, en 2015 los científicos la descubrieron también en la piel. Tres tipos de opsinas participan en la absorción de esta luz azul. La opsina 1 trata la luz azul-violeta y está presente principalmente en las membranas de los queratinocitos, en la capa superior de la epidermis. La opsina 2, receptora de la luz azul-verde, está presente al mismo nivel; la opsina 3, sensible a la luz azul, está instalada de manera más difusa en la piel, principalmente a nivel de las membranas de los queratinocitos y melanocitos.
 
Activadas por la luz azul, están en el origen de una cadena de reacciones celulares que participan en la sincronización de los relojes biológicos cutáneos y en el equilibrio de la piel. Este mecanismo falla cuando hay un exceso de luz azul. Las opsinas se saturan y todos los mecanismos celulares que producen habitualmente se bloquean. En su lugar se instala un proceso de estrés oxidativo que altera las membranas celulares, pero también el ADN mitocondrial. Como resultado: una barrera cutánea debilitada y daños celulares, a los cueles se suma el fruncimiento de los ojos incesante frente a las pantallas. En definitiva, ojeras, bolsas, arrugas, signos de fatiga acentuados… la exposición a la luz azul de las pantallas intensifica los desórdenes estéticos del contorno de los ojos.
 
 
 

MEDICINA MIRADA: REJUVENECER A OJOS VISTA

La medicina estética cuenta con un amplio arsenal de terapias, encaminadas a rejuvenecer la mirada y el contorno de ojos. En todos los casos, se trata de técnicas que exigen una praxis muy precisa y que por sí solas consiguen mejorar la apariencia de todo el rostro.
 

 

Leer más

La parte final del Especial Belleza de la Mirada, del número de marzo de la revista NUEVA ESTÉTICA, la dedicamos a repasar el amplio abanico de tratamientos médicos encaminadas a devolver la vitalidad a la mirada, difuminar las ojeras, reposicionar las cejas, borrar líneas de expresión, arrugas en los párpados... 
Para presentar las técnicas más innovadoras y eficaces contamos con la colaboración, por un lado, de la Dra. Alejandra Méndez de Vigo y el Dr. José Contreras Sánchez, ambos especialistas en medicina estética y antienvejecimiento, y por otro, del Dr. Moisés Martín Anaya, cirujano plástico y estético.

 

Puedes leer el ESPECIAL BELLEZA DE LA MIRADA completo en la Revista de marzo 2021.
Si todavía no eres suscriptora, puedes hacerte directamente desde aquí.