Esta petición surge tras la entrada en vigor de nuevas medidas como consecuencia de la situación epidemiológica derivada del COVID-19 en la comunidad andaluza.
El cierre de los salones de belleza en Andalucía afecta a más de 2.800 centros y tendría un impacto económico en torno a los 8,8 millones de € por cada semana de cierre y 35 millones cada mes de suspensión de la actividad.
Este sector se compone en su mayoría de pequeños negocios y genera un empleo directo a 9.000 trabajadores, 2.300 de los cuales son autónomos y un 95%, mujeres.