El informe de STANPA (Asociación Nacional de Perfume y Cosmética) es muy detallado e incluye los siguientes puntos:

 

1 La Unión Europea, y en consecuencia todos los estados miembros, posee una de las legislaciones más exigentes y restrictivas en lo que a seguridad cosmética se refiere.

2 En España a quien corresponde evaluar los estudios científicos de eficacia y seguridad, en este caso de los productos solares, es a la Agencia Española de Medicamentos y Productos Sanitarios.

3 La OCU no dispone de personal con el conocimiento científico pertinente para entrar a valorar un tema tan complejo, como el factor de protección en un bronceador para niños.

4 Los productos cosméticos para la protección solar infantil están sujetos a estrictas evaluaciones, que garantizan la veracidad sobre sus niveles de protección.

5 El informe de la OCU carece de transparencia: no se indica dónde se ha realizado, ni quién es el equipo investigador, ni se describe adecuadamente la metodología seguida. 

6 El FPS (factor de protección solar) se determina aplicando el método in vivo International Sun Protection Factor Test, técnica estandarizada, aceptada

internacionalmente. Este método ha sido actualizado por la industria europea, japonesa, estadounidense y sudafricana según indica la Norma ISO 24444:2010. Esta Norma ISO tiene en cuenta diferentes parámetros esenciales en la protección solar: latitud y longitud geográfica y variaciones en función de la hora y estación, con la finalidad de que los protectores solares reproduzcan las radiaciones UVA y UVB que llegan a la Tierra. 

7 El método de análisis de los protectores no es fácil porque entran en juego muchas variables: metodología de aplicación, variación de formulaciones cosméticas, algunas muy novedosas, tipo de piel… por lo tanto se requieren profesionales de alto nivel, con conocimientos científicos y ampliamente entrenados para interpretar correctamente los resultados. 

8 Las empresas encargan la determinación del FPS y la protección frente al UVA de sus productos a laboratorios especializados y con experiencia. Es la manera de garantizar objetividad y precisión en los resultados. 

9 Las conclusiones publicadas por OCU, deberían ser contrastados en varios laboratorios con las diferentes fórmulas testadas, ya que acusar injustificadamente de que un producto “no cumple” con pruebas realizadas en un solo laboratorio del que se desconoce la metodología seguida y las condiciones del ensayo, es grave e insuficiente para asegurar tal afirmación.