MAKE UP OTOÑO, OJOS AHUMADOS POR DAVID DEIBIS

Por Nueva Estética

El reconocido maquillador David Deibis, querido colaborador de NUEVA ESTÉTICA, nos presenta en esta edición un maquillaje para esta temporada donde la mirada adquiere fuerza. Para ello nos descubre la técnica que hay detrás de los ojos ahumados... sofisticados pero a la vez sutiles e intensos y románticos. Toma nota!

Tez de terciopelo

Para conseguir este look es muy importante elegir una base de maquillaje que aporte a la tez un aspecto natural. Para ello, optar por una base ligera y de cobertura media, que dé ese toque nude y otorgue luz a las facciones. Eso sí, para un buen acabado, aplicarla con una brocha o una esponja húmeda y difuminarla suavemente sobre el rostro, prestando especial atención a las áreas problemáticas. Evitar utilizar demasiado producto para mantener un aspecto fresco. Después, utilizar corrector e iluminador para igualar el tono cutáneo. Echar mano de un buen corrector de ojeras para eliminar pequeñas imperfecciones y conseguir un acabado totalmente uniforme. Aplicarlo mediante pequeños toques y extenderlo suavemente. A continuación, utilizar un iluminador líquido o en crema en los puntos altos del rostro, como por ejemplo los pómulos, el arco de Cupido y el puente de la nariz. De esta forma la piel lucirá un brillo único.

Blush de lo más natural

Para elevar los pómulos, extender un blush natural en zonas estratégicas, con la idea de crear un efecto difuminado y armonioso que realce las facciones: pómulos y sienes, incluso los párpados. Este look busca imitar el resplandor que se obtiene después de pasar un día al sol. Sigue estos consejos para conseguir un natural blush:

Menos es más: La clave es la sutileza. Comenzar con una pequeña cantidad de producto e ir añadiendo más hasta lograr la intensidad deseada.

Difuminar bien: Es importante difuminar bien los productos para evitar líneas duras y conseguir un acabado natural.

Adaptabilidad: Este look resulta ideal para todos los tipos de piel. Sólo es preciso encontrar los tonos cálidos que mejor se adapten al color natural de la misma.

Smokey eyes, mirada intensa

Para conseguir unos ojos ahumados impecables el primer paso es aplicar la prebase por toda la zona del párpado. Así se unifica el tono y la piel de esta zona estará mejor preparada para recibir el resto de los productos que se van a utilizar. Después, delinear el ojo, tanto por la parte de arriba como por la de abajo con el khol. Es importante realizar este trazo lo más cerca posible de las pestañas. No pasa nada si la línea no queda perfecta porque después, con ayuda de un pincel fino se terminará de darle la forma y la textura deseada. Ahora llega el momento decisivo, aplicar las sombras. Empezar trabajando con la sombra de ojos más oscura. Seguramente, ésta será en tono negro. Ir extendiéndola por todo el párpado con un pincel. Lo ideal es que el color esa mucho más profundo en la parte más cercana a las pestañas y más difuminado en la parte superior. Luego, elegir una sombra de ojos más clara, tirando a una tonalidad beige o blanca, y extenderla debajo de las cejas para aportar ese toque difuminado. Este tono claro lo que hará es aportar luz a la mirada tras la intensidad de los tonos más oscuros. Finalmente, aplicar la máscara de pestañas. Si ésta es importante en un maquillaje sencillo, todavía lo es más en un look como el que presentamos. Con ella se intensificará la mirada y la dotaremos de mayor profundidad.

Labios en café y chocolate

Como no podía ser de otra manera, los tonos otoñales para vestir los labios son, sin duda, los marrones: tirando a café, chocolate y caramelo. Eso sí, el matiz del marrón que se escoja es decisivo. No necesariamente debe ser un tono chocolate puro, pero quizás un chocolate rosa, con leche, un praliné o un nude intenso... hay que escoger siempre el que más favorezca al tipo de piel. Ahora se llevan más que nunca los labiales en acabado mate, café, glossy o, incluso, combinado con el maquillaje latte, que es tendencia este otoño.