%title
FORMULACIONES COSMÉTICAS PROBIÓTICAS, LO QUE HAY QUE SABER
Por Nueva Estética
Mucho se está oyendo hablar de los productos enriquecidos con probióticos, pues han demostrado de sobra su importante labor en la salud de la piel. Desde Esse Skincare, nos hablan sobre dichas formulaciones cosméticas con la idea de acarar algunas dudas sobre sus bases legales. En este sentido, hay que decir que el reglamento sobre cosméticos de la UE no menciona en absoluto los probióticos, por lo que no prohíbe su uso en productos cosméticos.
En relación a este tema, un aspecto que ha que tener en cuenta es la parte relacionada con el empleo de conservantes, que debe realizarse en un producto cosmético. Y en referencia a este asunto, la normativa es la siguiente.
Calidad microbiológica Respecto a las especificaciones microbiológicas de la sustancia o mezcla y del producto cosmético, se prestará especial atención a los cosméticos utilizados alrededor de los ojos, en las membranas mucosas en general, en la piel dañada, en los niños menores de tres años, en las personas mayores y en los ancianos y en personas que presenten respuestas inmunitarias comprometidas.
Resultados de la prueba de desafío de conservación Resulta necesaria para probar la seguridad del producto cosmético, desafiando la formulación mediante la adición de especies patógenas conocidas y ver si la formulación puede protegerse contra la contaminación y otros facyores. Sin embargo, no todos los productos cosméticos requieren una prueba de desafío. Los productos con baja disponibilidad de agua o sin agua disponible, por ejemplo, un producto a base de aceite, no corren riesgo de contaminación y crecimiento, ya que todos los microbios necesitan agua para crecer y multiplicarse. Por lo tanto, se puede incluir el probiótico en un producto cosmético que no tenga agua porque sin el agua disponible, los probióticos permanecerán en estado de hibernación y las especies patógenas no podrán multiplicarse.
Dicho esto, se tendrá que demostrar que los productos contienen la especie correcta de probióticos y no una especie patógena.
INCORPORACIÓN DE PROBIÓTICOS VIVOS EN LAS FÓRMULAS
Respecto a los tipos de probióticos que se utilizan en cosmética, hay mucha confusión. Un probiótico como tal, es una bacteria viva, aunque la industria de la cosmética ha adquirido ese término para referirse a todo tipo de extractos derivados de ellos.
Cuando en un INCI aparece la palabra Fermento de lactobacillus, Ferment… es un subproducto derivado de un caldo donde se cultivaron probióticos con anterioridad, es decir, quedan sus metabolitos. Este puede tener algunos efectos como antioxidante y antiinflamatorio. Igualmente en otros casos, pueden ser extractos probióticos con alto contenido en pépticos antimicrobianos.
En el caso de que apareciera la palabra Lactobacillus, se refiere a microbios desactivados por calor pero que todavía tienen varios beneficios sobre la piel: aumentan la producción de defensinas de nuestras células, mejoran la función de la barrera y ocupan espacio para evitar el anclaje de patógenos nuestras células. Y, por supuesto, también se refieren a los probióticos vivos.
Por tanto, una forma de distinguir si un producto tiene probióticos vivos o no es comprobar si tiene conservantes o no. Una crema, siempre tendrá una base de agua y otra de aceite, emulsionantes, conservantes y el resto de principios activos e ingredientes. Tanto los conservantes como los emulsionantes matan los probióticos (los del producto y los de la propia piel), por este motivo, desde Esse Skincare los productos con probióticos vivos se envasan en una solución de aceite. Los beneficios de los probióticos vivos son evidentemente, mayores de sus fermentos o extractos; y es que mediante una serie de acciones son capaces de ralentizar el envejecimiento, reducir la sensibilidad, equilibrar la piel, hidratar y proteger.
Dado el embrollo con el término “probiótico”, la FDA acaba de acuñar el término “Bioterapeútico vivo” para aquellos microbios vivos que pueden utilizarse para la prevención y/o tratamiento de enfermedades. Desde Esse, se refieren igualmente a una bacteria viva como “Bioterapeútico vivo” o como “Probiótico”. Respecto al resto de extractos o fermentos bacterias probióticas, se refieren como “Postbióticos”. Aclarar, que en Esse, no se utilizan los fermentos con metabolitos ya que hay total ausencia de extracto o fermento de probióticos y los beneficios que pudieran causar, los multiplican las otras variantes de Postbióticos. Desde Esse, tampoco se patenta un probiótico vivo o modificado genéticamente ya que consideran que algo que existe en la naturaleza no puede ser propiedad de una empresa, corporación o persona, sino que puede ser utilizada por cualquiera que lo desee.