Elige tu Especial
Siempre se ha dicho que la unión hace la fuerza. Y en cosmética esta premisa es imperante porque cuando los científicos elaboran las formulaciones buscan la mejor conjugación de activos, y realizan dicha selección teniendo en cuenta parámetros de total compatibilidad y eficiencia. Y no es para menos, porque la sinergia de estos ingredientes determinará los resultados obtenidos y, por ende, la confirmación del éxito. Pues bien, cuando hablamos de retinol, esta regla no es una excepción. Todos conocemos de sobra las incalculables virtudes de esta famosa y “todopoderosa” sustancia, y para qué ocultarlo, también sabemos que presenta un pequeño inconveniente, la posibilidad de causar descamación cutánea, sensación de incomodidad e irritación, alteraciones que están ligadas a la retinización, pero sabemos que este proceso es algo pasajero y, una vez transcurrido, el retinol es capaz de desplegar en la piel todo su potencial de belleza y juventud.
Los tiempos en que la única concesión que hacían los hombres al cuidado personal era el uso de un simple after-shave después del afeitado hace mucho que quedaron atrás. El hombre de hoy en día acude al gimnasio, vigila su dieta y quiere mostrar una imagen impecable. Tanto es así que ellos han dejado de ser un público residual de los centros de estética para convertirse en tarjet asiduo.
En nuestra piel conviven aproximadamente entre 1,5 y 2 billones de bacterias “buenas” que se encargan de preservar su salud y bienestar, así nos lo explica Arkaitz Felices, Management / Care & Beauty. Care, REVIDERM España. Se trata de una cifra realmente notable como para prestar a este admirable escuadrón de belleza la atención que se merece. En este ESPECIAL ponemos el foco de mira en la encomiable labor que cumplen estos microorganismos y cómo los tratamientos cosméticos pueden convertirse en sus mejores aliados en pro de salvaguardar la juventud e integridad de la piel.