OBJETIVO REGENERAR
El envejecimiento de la piel no es únicamente una cuestión biológica, ya que sólo el 30% de este proceso viene marcado por la edad, mientras que el 70% restante está condicionado por las agresiones externas. Es por ello que extremar la medidas de seguridad de la piel será una estrategia fundamental para mantener intacta su integridad. Los tratamientos regenerantes actúan como verdaderos guardaespaldas de belleza, que custodian todas y cada una de las funciones biológicas cutáneas, asegurando el correcto intercambio metabólico entre las células. Si buscamos en el diccionario el término regeneración veremos que su definición dice así: proceso encargado de reparar o reconstruir cualquier daño. Si hacemos referencia a la piel, esta palabra no pierde ni un ápice de su significado; la regeneración cutánea consiste precisamente en eso: restaurar aquellas partes del tejido que se han visto alteradas por el envejecimiento, contaminación, exposición solar…
OBJETIVO OXIGENAR
Aunque la regeneración es un proceso vital para la piel, si ésta no cuenta con la energía necesaria para llevarla a cabo, no hay nada que hacer, y aquí es cuando entra en escena la oxigenación. Para asegurar la correcta actividad de las células y, por tanto, su correcto metabolismo, son imprescindibles dos elementos clave: el oxígeno y las citoquinas. Mientras el primero proporciona vitalidad y energía a todas las células, las segundas son la llaves moleculares para el control celular. Pues bien, centrémonos en el primero. Como ya hemos adelantado, el oxígeno resulta un elemento esencial para el correcto funcionamiento de la piel. Sin él, las células no pueden desempeñar su trabajo a pleno rendimiento. Además, éste acelera el proceso de maduración de las cadenas polipeptídicas que han de converse en colágeno. De manera que cuanto más recibe oxígeno un tejido, más energía tiene para auto-regenerarse y revitalizarse.
OBJETIVO FRENAR LA FOTOEDAD
Las fotoarrugas y la elastosis solar son los signos más evidentes tras los excesos del verano. Sin duda, la piel es especialmente susceptible a los ultravioletas de la luz del día, particularmente a los UVA, responsables directos de las 2/3 partes del envejecimiento cutáneo. Y aunque su acción sobre la piel depende de varios factores, como por ejemplo la estación del año, hora del día, altitud... es mejor que no nos pille desprevenidos. Por ello, la profesional debe concienciar a sus clientas de lo importante que es proteger la piel de sus estragos. La actitud más inteligente es utilizar siempre una cosmética fotoprotectora que palie en la medida de lo posible sus consecuencias más directas. Y es que el precio a pagar es demasiado alto: cutis arrugado y carente de vida, aspecto apergaminado... y todo ello por no prestarle a la piel las atenciones necesarias. Este declive de la juventud no es más que el resultado de la alteración de las fibras elásticas que provocan la formación de arrugas, y la pérdida de firmeza y elasticidad por parte de la dermis; es lo que los dermatólogos denominan envejecimiento foto-inducido.
OBJETIVO HIDRONUTRIR
Respecto a las necesidades de hidratación de la piel... qué podemos decir que no se sepa ya, pues como la esteticista bien conoce, la hidratación es uno de los cuidados de belleza más preciados. Y es que para el cutis, el agua es una necesidad primaria, es algo así como una cuestión de supervivencia. Sin ella, muestra un aspecto quebradizo, acartonado, poco flexible y carente de luminosidad... Pero a veces mantener el correcto nivel hídrico es más que complicado, pues la piel se enfrenta diariamente a duras pruebas de resistencia y se ve constantemente amenazada por las agresiones de agentes externos como el sol, la contaminación y las condiciones climáticas. A pesar de que la cantidad de agua en la dermis no experimenta grandes variaciones, una mínima disminución del contenido hídrico de la epidermis podría tener graves consecuencias en la configuración del conjunto dérmico, produciendo una marcada deshidratación y acelerando el proceso de envejecimiento. Devolverle de nuevo su confort y bienestar es un acometido propio de la cosmética hidro-protectora capaz de volver a levantar una barrera cutánea eficaz, flexible y resistente.
OBJETIVO BORRAR LAS MANCHAS
Una piel impecable es aquella que posee una tonalidad uniforme, nítida, transparente y libre de imperfecciones. Eso sí, este objetivo sólo puede lograrse, si le prestamos la atención que se merece desde una edad muy temprana. Y es que si queremos ganar la batalla a las manchas, no basta con ofrecerle a destiempo, unos cuidados precipitados, cuando el daño ya es inminente.