MANZANA. Comer una fruta con propiedades similares a la de la manzana diariamente regula el apetito ya que es alta en fibra y ayuda a apagar la respuesta del cerebro a querer más comida y al estómago a sentirse lleno. Además, la fibra estabiliza los niveles de azúcar en sangre.
FRUTOS SECOS. Contienen grasas saludables y ayudan a mantener el colesterol bajo. Además, son una buena fuente de fibra y, por lo tanto, ayudan, a mantener a raya al apetito debido a que permanecen más tiempo en el estómago que los hidratos de carbono. Es cierto que contienen bastantes calorías y ácidos grasos esenciales, por ello no debemos abusar de su ingesta.
SALMÓN. El salmón es un pescado con un alto contenido en ácidos grasos Omega3, lo que ayuda a saciar el hambre durante más tiempo, además también aumenta los niveles de Leptina, la hormona del apetito.
LENTEJAS O FRIJOLES. Ambos son ricos en almidón resistente, un carbohidrato que pasa a través del estómago sin ser digerido y se fermenta en el intestino grueso. Este proceso hace que el cuerpo utilice la grasa almacenada como combustible.
PATATAS. Cocidas satisfacen más que el arroz, el plátano o el pan. Horneadas también es una forma saludable de ingerirlas sin añadir demasiadas calorías al cuerpo. Hay que intentar evitar el aceite y si se utiliza que sea solo una gota de aceite de oliva.
AVENA. Enlentece la digestión y ayuda a la absorción de carbohidratos y a mantener el colesterol bajo. Contiene fibra, carbohidratos con almidón, vitaminas, minerales y grasas saludables.
HUEVOS. Comer huevos para empezar el día ayuda a la pérdida de peso, porque te mantiene en alerta sin apetito durante muchas horas. Conviene hacerlos a la copa o en tortillas con aceite en spray para no excederse y evitarlos fritos.
SOPA. Un primer plato de sopa ayuda a satisfacer el hambre y a bajar el apetito antes de la comida. Es preferible realizarlas con bajo contenido en grasas y añadirles verduras.
VERDURAS. Un buen plato de verdura hervida o a la plancha con un mínimo de aceita, además de saciar el apetito, ayudan a mantener la línea.
VINAGRE. Un poco de vinagre evita la sensación de hambre, debido a que disminuye el índice glucémico de los alimentos ricos en carbohidratos como la pasta.
Y finalmente, aunque el agua no es un alimento, en algunas ocasiones puede ayudarnos a evitar algunos antojos, además muchas veces confundimos el hambre con la sed. Es importante que el agua no esté muy fría ya que puede enfriar el sistema digestivo y dificultar la digestión de los alimentos.